En esta nueva edición de nuestro boletín informativo, profundizaremos más en este fascinante fenómeno algo intangible, pero tan importante: la Energía.
Sin energía, la vida puede volverse opaca, laboriosa, agotadora y sabemos que en la enfermedad de Parkinson, que afecta a la gran mayoría de los usuarios de AtremoPlus, la falta de energía es uno de los problemas principales. Es un poco como un círculo vicioso: deberíamos hacer aún más cosas para evitar un declive demasiado rápido, pero nos falta energía para lograrlo.
En este contexto, nos complace especialmente observar que en nuestra reciente encuesta, los dos grupos de personas más afectadas por un nivel “muy bajo de energía” y “bajo de energía” disminuyeron en un 85,2% después de tomar AtremoPlus.
Un número significativo de personas pudo avanzar hacia la categoría de ‘buen nivel de energía’.
Solo el 11,4% de las personas pertenecientes a estos dos grupos con menos energía no notaron ningún cambio en su estado energético.
Afortunadamente, no todas las personas que respondieron a la encuesta están preocupadas por la falta de energía, sin embargo, incluso entre aquellas que ya tenían una buena cantidad de energía, muchas notaron un impulso adicional de energía, lo cual siempre es bienvenido.
Algunos participantes en la encuesta informaron un aumento relativamente bajo de su energía o incluso estancamiento. Esto puede atribuirse, entre otros factores, a una dosis demasiado baja. Algunas personas confunden la cantidad de la cucharada dosificadora y piensan erróneamente que al tomar 1 cucharada dosificadora al día, están tomando la cantidad mínima recomendada. Por lo tanto, es útil recordar que una cucharada dosificadora contiene 2,5 g de polvo. La dosis diaria mínima recomendada es de 5 g (es decir, 2 cucharadas dosificadoras). Esto es mínimo ya que el promedio de nuestros clientes toma 10 g por día (es decir, 4 cucharadas dosificadoras, en 2 tomas diarias). La dosis diaria máxima recomendada es de 20 g / día (es decir, 8 cucharadas dosificadoras).
Ahora exploraremos este fascinante mundo de la energía para comprender los mecanismos sutiles que influyen en nuestros niveles de energía.
En la Parte 1, examinaremos los procesos mediante los cuales nuestro organismo genera energía. Luego, en la Parte 2, abordaremos los factores que nos quitan energía. Finalmente, en la Parte 3, estudiaremos cómo los principios activos de la Vicia faba, a partir de los cuales se elabora nuestro suplemento alimenticio, influyen positivamente en nuestro aporte energético.
Parte 1 – ¿Cómo genera energía nuestro organismo?
Esta pregunta es bastante compleja y aún no está totalmente esclarecida por la ciencia.
Sin embargo, ya disponemos de algunos parámetros importantes y fascinantes que podemos observar para comprender mejor nuestras necesidades energéticas y cómo responde nuestro cuerpo para producirla.
Para ello, exploraremos las necesidades de energía:
a) a nivel celular, y
b) a nivel de todo nuestro cuerpo,
Ya que la ciencia ha descubierto perturbaciones en estos dos niveles en la enfermedad de Parkinson.
a) ¿Cuáles son las necesidades de energía a nivel celular?
Para comprender completamente los mecanismos de generación de energía, es instructivo centrarse primero en las entidades más pequeñas que componen nuestro cuerpo: las células.
Cada una de las células requiere energía para existir, realizar sus tareas y luego dividirse para regenerarse a lo largo de nuestra vida.
Nuestro cuerpo puede ser asimilado así a un vasto sitio de construcción perpetua, que desde nuestro nacimiento (con su construcción), está en constante renovación y reparación. Los especialistas estiman que renovamos completamente nuestro cuerpo cada 7 años.
Imagina que estás construyendo una casa y que debes modificarla constantemente, de manera que después de 7 años, no haya ninguna piedra, cable eléctrico, mueble, lámpara o árbol en el jardín que sea idéntico a los del inicio de la construcción.
Es exactamente lo que ocurre en nuestro cuerpo. Cada día, decenas de millones de células mueren y son reemplazadas por nuevas. Es un proceso colosal que requiere cantidades fenomenales de energía.
Entonces, la pregunta que surge es ¿cómo nuestras células, con sus diversas tareas, logran generar suficiente energía para llevar a cabo sus misiones?
La naturaleza ha diseñado perfectamente la generación de energía a nivel celular, ya que cada célula contiene en sí misma pequeñas centrales energéticas llamadas mitocondrias, que producen un combustible llamado ATP (Adenosín Trifosfato).
Estas pequeñas centrales energéticas requieren ciertos elementos y condiciones para producir la energía necesaria para llevar a cabo muchas tareas.
Es bien sabido que la nutrición desempeña un papel crucial al proporcionar los elementos necesarios, pero también es interesante notar que estas mitocondrias poseen componentes fotosensibles y reaccionan a la luz. Algunas vitaminas, como la vitamina D3, por ejemplo, se sintetizan en mayor cantidad por el cuerpo bajo la influencia de la luz.
Otros factores intervienen en la generación de energía, ya que también somos seres eléctricos: cada célula posee un potencial eléctrico que contribuye a nuestro equilibrio energético.
En resumen, se trata de un sistema extremadamente sofisticado que permite a nuestras células obtener la energía necesaria para llevar a cabo sus funciones asignadas.
b) ¿Cuáles son las necesidades de energía a nivel más global?
Además de las necesidades energéticas a nivel celular, resulta instructivo examinar nuestras necesidades energéticas a un nivel más global.
Cada órgano y cada parte de nuestro cuerpo requiere energía para funcionar. Por ejemplo, nuestro corazón necesita energía eléctrica para latir sin interrupción día y noche. Nuestros músculos necesitan energía para realizar movimientos mecánicos. Nuestro sistema digestivo requiere energía para descomponer los alimentos en varios componentes, incluyendo la glucosa, para proporcionar energía. Nuestros pulmones necesitan energía para la respiración. Nuestro cerebro consume enormes cantidades de energía para pensar, tomar decisiones y realizar innumerables cálculos.
Al considerar estos componentes como los órganos y las estructuras musculares, examinemos los circuitos energéticos de nuestro cuerpo desde una perspectiva más global.
Nuestro organismo se basa fundamentalmente en dos principios: uno es bioquímico y el otro es eléctrico. Estos dos principios interactúan en perfecta armonía para garantizar el funcionamiento de nuestro cuerpo. De hecho, nuestras neuronas transmiten señales tanto eléctricas como bioquímicas, utilizando así la energía producida por las células.
En este contexto bioquímico, la energía proviene de lo que llamamos neurotransmisores y dos son particularmente interesantes para nosotros. Se trata de la dopamina y la noradrenalina.
Estos dos neurotransmisores son esenciales en nuestras respuestas al estrés, las emociones, nuestra motricidad, tanto a nivel cognitivo como motor para nuestra vitalidad. Son reguladores de nuestra energía y nuestro dinamismo.
Parte 2 – ¿Qué factores restan energía a nuestro organismo?
Existen una serie de elementos que restan energía a nuestro organismo y vamos a analizarlos especialmente desde la perspectiva de aquellos que sufren de Parkinson.
a) En el plano celular
A lo largo de las investigaciones, los expertos han observado que la enfermedad de Parkinson puede estar asociada con un mal funcionamiento de las mitocondrias, estas pequeñas unidades de producción de energía en las células. Estas unidades, responsables de la producción de energía a nivel celular, son especialmente atacadas por los radicales libres que las dañan o las destruyen. Por lo tanto, en el contexto de la enfermedad de Parkinson, la generación de energía se ve perturbada, lo que obstaculiza el buen funcionamiento de las células y agota la energía de la persona afectada.
b) En el plano del organismo en su conjunto
La enfermedad de Parkinson se caracteriza por una destrucción parcial de la unidad de producción de dopamina en el cerebro. El diagnóstico se realiza a menudo cuando el 60 al 80 % de las neuronas dopaminérgicas ya están destruidas. Por lo tanto, esta unidad de producción de dopamina ve reducidas en gran medida sus capacidades y tiene dificultades para satisfacer las necesidades de nuestro organismo en dopamina. En consecuencia, este combustible universal, esencial para sentirse en forma, realizar movimientos, pensar con claridad y experimentar alegría, se produce en cantidades inferiores. Las personas entonces experimentan las importantes consecuencias de la falta de dopamina que conlleva una multitud de disfunciones energéticas.
Esto también afecta a otro neurotransmisor, la noradrenalina, indispensable para mantener un estado de ánimo positivo y sentirse dinámico.
En resumen, los problemas relacionados con la enfermedad de Parkinson generan un círculo vicioso: la falta de energía a nivel celular, junto con una disminución de la dopamina y la noradrenalina, así como un alto estrés oxidativo, desencadenan una cascada de problemas que agotan aún más a las personas afectadas en términos de energía.
Si aún no has visto el video simple y comprensible que explica este fenómeno del estrés oxidativo, aún puedes hacerlo haciendo clic en la imagen.
Parte 3 – ¿Qué principios activos en la Vicia faba podrían estar detrás de este significativo aumento que reportan los usuarios de AtremoPlus?
Ahora vamos a intentar comprender por qué muchos usuarios informan de un aumento significativo en su vitalidad y energía.
Por supuesto, no podemos desentrañar los fenómenos y evaluar con precisión el impacto de cada principio activo de la Vicia faba en los complejos mecanismos de producción de energía en los usuarios de AtremoPlus.
Sin embargo, podemos plantear algunas hipótesis plausibles, respaldadas por los resultados de ensayos clínicos, los comentarios de nuestros clientes, así como las investigaciones de la comunidad científica que atribuyen ciertas funciones a estos principios activos.
Estos elementos podrían explicar este fenómeno positivo de aumento de energía informado por muchos usuarios de AtremoPlus.
La demostración de un círculo virtuoso a partir de los principios activos de la Vicia faba:
Para comprender lo que puede estar sucediendo para los usuarios de AtremoPlus que informan de un aumento de energía, primero nos parece interesante examinar el concepto de “círculo virtuoso”. En otras palabras, ¿cuáles son sus dinámicas o cuándo podemos hablar de un proceso virtuoso?
1. Cuando los efectos positivos son sucesivos: Cada etapa del proceso conlleva un efecto positivo que contribuye a fortalecer el siguiente.
2. Cuando hay una sinergia de acciones: Las diferentes acciones o factores involucrados interactúan de manera sinérgica, amplificando los efectos positivos entre sí.
3. Cuando el ciclo de mejora es continuo: El círculo virtuoso crea un ciclo continuo donde cada éxito o mejora alimenta al siguiente, llevando a una progresión constante.
4. Cuando hay un refuerzo mutuo: Los elementos del proceso se refuerzan mutuamente, lo que resulta en un aumento acumulado de los resultados positivos.
5. Cuando se crea una dinámica positiva: El círculo virtuoso genera una dinámica positiva que favorece el crecimiento, el bienestar o el logro de los objetivos previstos.
Manteniéndonos en esta lógica de comprensión, veamos ahora cómo podríamos explicar de manera coherente la idea de círculo virtuoso que reportan los usuarios de AtremoPlus:
1. Disminución de los daños del estrés oxidativo a nivel celular: Como se sabe, los numerosos componentes antioxidantes, incluida la vitamina E, reducen los daños del estrés oxidativo a nivel celular y, en última instancia, también en las mitocondrias. Recordemos que las mitocondrias son pequeñas centrales energéticas. Por lo tanto, la disminución del estrés oxidativo complementada por la continua creación de nuevas células (división celular) podría ofrecer una mejor situación energética básica, ya que cada una de estas nuevas células podría realizar sus funciones con más energía.
2. Disminución de la inflamación crónica: Este efecto antioxidante también podría tener un papel positivo en la disminución de la inflamación crónica siempre asociada con el Parkinson, y generar un terreno más propicio para la supervivencia de las células.
3. Disminución del dolor: Una reducción de la inflamación crónica podría estar perfectamente relacionada con menos dolor, como lo informan regularmente los usuarios de AtremoPlus. Consulte también el boletín número 5 y 6 cuyos enlaces tiene a continuación.
4. Mejora de la calidad del sueño: Menos dolor podría favorecer una mejor calidad del sueño, que, como sabemos, es reparadora. Los usuarios de AtremoPlus informan regularmente sentirse más rejuvenecidos después de dormir mejor. Vea los boletines número 2, 3 y 4 cuyos enlaces tiene a continuación.
5. Más dopamina en el cuerpo: La aportación de L-dopa de la Vicia faba proporciona más dopamina al cerebro, como se ha demostrado en los ensayos clínicos de nuestro producto.
6. Papel esencial de la carbidopa: Naturalmente contenida en la Vicia faba, la carbidopa facilita el transporte de mayores cantidades de L-dopa al cerebro a través de la barrera hematoencefálica. Esto también podría contribuir a explicar por qué las personas se sienten más en forma.
7. Menos rigidez, temblores o lentitud motora y cognitiva: Las mayores cantidades de dopamina en el cerebro pueden contribuir a menos problemas como rigidez, lentitud motora y cognitiva, temblores y otros problemas relacionados con la falta de dopamina. La reducción de estos problemas, que son alienantes en la vida diaria, libera más energía para realizar actividades con más facilidad y vitalidad.
8. Aumento significativo de la noradrenalina: El aumento de la dopamina también conlleva un aumento significativo de la noradrenalina, como pudieron demostrar nuestros ensayos clínicos. Sabemos que la noradrenalina es muy importante para sentirnos en forma, ya que ejerce funciones importantes en la vigilancia, la memoria, la impulsividad, el estado de ánimo, entre otros.
9. Menos estrés y ansiedad: Emocionalmente, la ansiedad y el estrés están muy relacionados con la falta de dopamina y noradrenalina, por lo que una mejora en estos neurotransmisores podría contribuir a reducir el estrés y la ansiedad. Además, los ensayos clínicos han demostrado una reducción en los biomarcadores de estrés como el cortisol.
10. Se favorece la plasticidad cerebral: Tener más energía nos permite realizar más actividades y ser más creativos, lo que favorece la plasticidad cerebral. Vea el enlace del boletín número 9 a continuación. Además, algunos principios activos de la Vicia faba son conocidos por ser componentes que favorecen la fabricación de nuevas neuronas y sinapsis (BDNF – Factor Neurotrófico Derivado del Cerebro) que la ciencia descubre con mucho asombro.
11. Impacto positivo en la expresión génica: Los principios activos de la Vicia faba han demostrado, en nuestros ensayos preclínicos y clínicos, tener un impacto positivo en la expresión génica (epigenética) y pueden contribuir a reducir los agregados de proteínas mal plegadas (placas), favoreciendo así una mejor dinámica energética cerebral. Uno de los resultados de estos estudios clínicos sobre nuestro producto en este campo mostró una reducción significativa de los problemas de depresión y mejoras cognitivas en los participantes. Puede consultar el enlace a nuestro boletín número 10 a continuación sobre epigenética.
Lo más importante es que sienta más energía
De hecho, los mecanismos de este círculo virtuoso probablemente sean aún más complejos debido a la multitud de oligoelementos en estado de traza presentes en la Vicia faba, cada uno con efectos positivos en la generación de energía.
Esta planta Vicia faba es notablemente rica en oligoelementos, conteniendo prácticamente todos los minerales importantes (como magnesio y zinc), así como casi todas las vitaminas esenciales (como las vitaminas A, grupo B, C, D y E), y estos elementos son importantes en la producción de energía. Además, ofrece una variedad de aminoácidos, los componentes básicos de nuestro cuerpo, así como flavonoides, carotenoides y polifenoles con poderosas propiedades antioxidantes, entre otros, que actúan en perfecta sinergia para preservar el cuerpo de los daños del estrés oxidativo, tan importante en la generación de energía.
Puede explorar más estas sinergias consultando el boletín informativo sobre la abundancia de L-dopa y oligoelementos de la planta Vicia faba, disponible en el boletín informativo número 11, cuyo enlace se proporciona a continuación.
Lo que podemos afirmar es que, a pesar del proceso de envejecimiento natural de nuestro organismo, recibimos regularmente comentarios positivos de los usuarios y sus neurólogos. Se sorprenden gratamente por las mejoras rápidas e impresionados por la estabilidad a largo plazo (confirmada por nuestros 8 años de experiencia desde su lanzamiento al mercado) para los usuarios más antiguos. Esta estabilidad también se traduce en una mejora continua de su nivel de energía. Encontrará el enlace al boletín informativo 1 a continuación.
En última instancia, lo más importante es que muchos usuarios experimentan un significativo aumento de energía y ahora tiene algunas pistas para comprender algunas de las causas.
Para concluir esta carta, nos gustaría compartir con usted el testimonio muy representativo de una de nuestras clientes, a la que agradecemos sinceramente:
“Me sentía muy cansada antes de tomar Atremoplus y no estaba motivada para hacer cosas. Los temblores, dolores y debilidades musculares han disminuido considerablemente después de tomar Atremoplus y tengo más energía. Me siento mucho mejor. Muchas gracias”.
Brigitte
Este contenido puede ser importante para las personas que necesitan esta solución natural. Gracias por compartir !
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Descargo de responsabilidad:
Tenga en cuenta que este blog proporciona información sobre nuestro suplemento dietético AtremoPlus y temas relacionados.
Este blog no pretende proporcionar asesoramiento médico.
Si tiene alguna pregunta médica, comuníquese con su profesional de la salud.
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